jueves, 31 de mayo de 2012

Bizcocho tierno de leche y almendras



Este bizcocho me gustó desde el principio porque lleva leche. Normalmente los bizcochos básicos que hacemos suelen llevar aceite de oliva o girasol pero omitimos la leche.


La ventaja es que es un bizcocho muy jugoso, no demasiado dulce y que se conserva bastante bien. 

Ingredientes
  • 3 huevos
  • 250 g de leche
  • 250 g de harina de reposteria
  • 220 g de azúcar
  • 170 g de aceite de oliva
  • 40 g de almendras laminadas
  • 1 sobre de levadura química (Royal, Hacendado,...)
  • Azúcar glas para espolvorear

Elaboración

Ponemos el horno a precalentar a 170º, arriba y abajo, y mientras preparamos la masa.

Batimos los huevos con unas varillas, añadimos, la leche, la harina, el azúcar, el aceite de oliva y cuando esté todo bien mezclado añadimos la levadura química. 

Engrasamos el molde con mantequilla, yo utilicé uno redondo pero si tenéis queréis utilizar uno cuadrado no hay problema.

Vertemos la masa en el molde y echamos sobre la masa las almendras laminadas.

Metemos en el horno, con calor sólo por abajo para que suba bien, durante 35-40 minutos a 160-170º.

Cuando esté lista la sacamos del horno, la desmoldamos y espolvoreamos azúcar glas sobre ella con un colador.

Probad y ya me contáis!


lunes, 14 de mayo de 2012

"Pan Básico y Sencillo para almas inquietas"


Está como se ve, crujiente, sabroso, húmedo, exquisito,... Pero qué va a decir una pseudopanadera enamorada de este manjar.


Tiene una ventaja por encima de todas, que es un pan sencillo, básico, que no quita demasiado tiempo y que se disfruta con cualquier cosa que le añadas porque convierte aquello a lo que acompaña en un manjar. Pero como todo lo bueno de la vida tiene un inconveniente y es que se acaba en un instante. 

Esta receta es de Xavier Barriga, con alguna modificación personal, pero es la receta de toda la vida, que también la tiene Richard Bertinet, Dan Lepard y cualquier panadero del rincón más recóndito del planeta. Es agua, levadura, sal y harina, ya está, sin nada más que añadir. La diferencia entre unas recetas y otras van a estar marcadas  por la cantidad de agua y sal.

Ingredientes: 

  • 500 gr de harina de fuerza
  • 8-10 gr de sal
  • 310 gr de agua
  • 5 gr de levadura fresca

Elaboración

Pesamos bien todos los ingredientes, y añadimos a la harina el agua, templada o a temperatura ambiente mejor, añadimos la sal y empezamos el amasado. Os aconsejo no echar toda el agua sino hacerlo poco a poco aunque os digo que cuando la masa tiene más agua es más bregosa de trabajar pero el pan es más esponjoso y húmedo. 

Después de amasar un poquito añadimos la levadura, deshaciéndola con las manos. 

Aunque os parezca un pan sencillo es de lo mejorcito por lo natural que es, fijaos en la poca cantidad de levadura que lleva, eso es sinónimo de natural.

Continuamos con el amasado hasta que nuestra masa esté lisa. Si vemos que la masa nos da trabajo la ayudamos con reposos de 5 minutos y continuamos amasando.

Dejamos reposar nuestra masa tapada con un  trapo de algodón durante 30 minutos.



Pasado este tiempo cortamos la masa en porciones, yo hice siete barritas. Tapamos las porciones y las dejamos de nuevo reposar durante 15 minutos.

Ahora formamos las barritas las colocamos ya sobre la bandeja del horno y las tapamos con un paño húmedo. Y ahora dejamos fermentar durante 90 minutos.

Precalentamos el horno a 230-250º, colocando dentro una olla o cuenco de barro con paño mojados para ir generando calor en el horno y que el pan salga crujiente.

Pasada la fermentación hacemos el greñado, cortes longitudinales al pan, espolvoremos con harina y metemos en el horno, que habremos bajado su temperatura a 180º.

En 15 minutos estarán listas. Las sacamos y las dejamos que se enfríen lejos de corrientes de aire. 

Este pan congela perfectamente y cuando se descongela está como recién hecho.

Disfrutadlo!!



Y mirad que foto tan curiosa!